Tratamiento de las deformidades craneales
El tratamiento de las deformidades craneales es muy variable según el origen y la severidad de la deformidad y la edad del paciente. A la hora de tratar debemos tener en cuenta tanto los aspectos estéticos como las posibles implicaciones funcionales de dicha deformidad. Algunas opciones de tratamiento incluyen:
Posicionamiento:
Es el tratamiento fundamental e inicial de las deformdidades que son de origen posicional y consistirá sencillamente en el cambio de posicionamiento del bebé para favorecer la remodelación del cráneo. Para que esta medida sea eficaz es muy importante que se inicie en los primeros meses de vida; cuanto antes, mejor. A medida que el niño crece, el cráneo va adquiriendo mayor rigidez y la efectividad del cambio posicional va disminuyendo. Además la actividad del niño va yendo en aumento y ello también acaba limitando la permanencia en esa diferente posición.
Hay muchos trucos que pueden ayudar a afianzar ese cambio en la posición durante el sueño, pero es el cumplimiento e insistencia de los padres en esta medida el factor más determinante del resultado final. Aún así, en ocasiones esta medida puede ser insuficiente para algunos pacientes.
En esta fase es importante que se haga un seguimiento de la evolución de la forma craneal para determinar si ésta se va corrigiendo de manera suficiente y en el tiempo adecuado.
Terapia física:
Dado que muchos casos de plagiocefalia posicional son secundarios a problemas de movilidad cervical tiene especial relevancia tratar primero éstos con fisioterapia para que secundariamente se pueda mantener la cabeza apoyada en la región contraria. Si el lactante no está cómo al girar en un sentido, automáticamente su tendencia será volver al apoyo inicial y no seremos capaces de redondear de nuevo su cráneo.
Además implementar ejercicios suaves de estimulación muscular puede fortalecer el cuello y contribuir al desarrollo equilibrado del cráneo.
Dispositivos Ortopédicos:
Solo cuando el manejo con cambio de posición y terapia física para la tortícolis congénita se consideran insuficientes, se recurre a la asociación al tratamiento de ortesis craneales. También se usa a veces tras cirugías de craneosinostosis a corta edad.
Estos dispositivos, parecidos a un casco, permiten redireccionar el crecimiento del cráneo ayudando a mejorar su morfología.
Suelen ser muy eficaces cuando se empiezan a usar a una edad adecuada, habitualmente no antes de los 5 meses ni después de los 7 u 8 meses. Es el especialista el que debe juzgar si su uso está recomendado en función de la evolución y tipo de deformidad en función de la edad del paciente, así como hacer un seguimiento durante su uso.
Cirugía
Solo se indicará en deformidades secundarias a craneosinostosis, ya que en estos casos la repercusión de la deformidad puede ser más importante y afectar al normal desarrollo del cerebro.
El tipo de cirugía será diferente según el tipo de craneosinostosis y la edad del paciente. A edades precoces, es decir antes de los 3 a 6 meses de edad, según el tipo de craneosinostosis, se pueden hacer cirugías asistidas por endoscopia, que implican menor invasividad y mejor resultado. Cuando el tratamiento es más tardío, la cirugía de remodelación implica mayor agresividad, cicatrices más amplias y mayor coste aunque el resultado final globalmente se ha reportado como parecido.
Seguimiento
Hacer un seguimiento del paciente en tratamiento por deformidad es importante con el fin de determinar si el tratamiento está siendo adecuado y si la mejoría sucede en el tiempo establecido. Además permite descartar que no aparezcan complicaciones u otras deformidades secundarias y que el crecimiento y desarrollo del niño progresa dentro de parámetros normales
Importancia de la Educación y apoyo familiar
Educar y asesorar a los padres sobre la importancia del tratamiento y la participación activa en el cuidado del niño son aspectos fundamentales. El apoyo emocional y la comprensión de los procedimientos ayudan a la familia a enfrentar el proceso de tratamiento con confianza.
Perspectiva a largo plazo
Con un diagnóstico y tratamiento oportunos, muchas deformidades craneales en niños tienen un resultado favorable. El enfoque precoz y correctivo contribuye al desarrollo saludable y al bienestar general del niño.